domingo, 3 de xuño de 2012

Lorenzo Silva


Lorenzo Silva, el 30 de mayo en el Liceo de Ourense
Lorenzo Silva comenzó la charla a la que asistimos el pasado día 30 hablando de la importancia que tiene para él encontrarse con los lectores, porque el oficio de escribir, aunque tenga como finalidad fundamental la comunicación, se realiza la mayor parte del tiempo en soledad. Pensaba yo, mientras tanto, que también la lectura se realiza, mayoritariamente, en soledad. A no ser... ¡que te apuntes a un club de lectura! Y allí estábamos, un escritor y un puñado de lectores compartiendo, además de la obra, un espacio: el Liceo.
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Alumnos del centro en la tertulia del 18 de abril
 Ha pasado ya algo más de un mes desde que algunos alumnos y alumnas de nuestro centro pusieron en común su lectura de "La estrategia del agua" con alumnos y alumnas de otros centros orensanos, y, por fin, pudimos compartirla también con su autor. Un autor que nos habló de su visión de la literatura como "ventana" a otros lugares, al conocimiento, pero, sobre todo, a la realidad. Porque la realidad, como la novela policiaca, está llena de misterios. Y además, nos dijo, porque una sociedad se retrata, también, por sus delincuentes, por cómo investiga sus crímenes, por cómo imparte justicia.

Y, así, en las novelas protagonizadas por Bevilacqua y Chamorro, como esta que hemos leído, se cuela la realidad española desde el nombre del protagonista, hasta temas de actualidad como la crisis económica, las relaciones entre hombres y mujeres, la paternidad o la justicia, pasando por las acciones (La estrategia del agua está basada en hechos reales), la evolución del país (los protagonistas y su entorno van evolucionando de acuerdo con el paso real del tiempo de las publicaciones) o los diferentes lugares en los que se desarrollan las novelas (los protagonistas de la novela pertenecen a un cuerpo especial de la Guardia Civil, que investiga crímenes en toda España. En lugares, según Lorenzo Silva, que ellos tienen que explorar, como forasteros)
 El autor nos habló también del trabajo de la Guardia Civil y de la justicia, temas que demostró conocer en profundidad. No en vano trabajó como abogado antes de poder dedicarse a la escritura, que era su auténtica vocación pero de la que durante un tiempo pensó que no podría vivir.

En fin, una conferencia que mereció la pena. Para los que os la perdisteis (¡conste que estábais todos invitados, eh!), Begoña ha tenido la gentileza de grabar algunos fragmentos.


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